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15 de febrero de 2011

¿Por qué no te has leído mi CV?

Una secretaria te acompaña a una sala de reuniones o despacho, dependiendo de la empresa es más o menos cutre. Estás un rato sola hasta que oyes el ruido de la puerta al abrirse, y ahí está. Un hombre / mujer que va a entrevistarte para ese trabajo al cual has enviado tu currículum vitae. Un trabajo sobre el que tampoco tienes muchas pistas porque la descripción del puesto no era muy detallada.
Te levantas, le das la mano, te da la mano, más o menos fuerte dependiendo del individuo, y te cede asiento. Y empezamos el ritual. Y entonces es cuando estás en tensión esperando ver qué tipo de espécimen te va a entrevistar. Y rezas para que no te diga “¿Me cuentas un poco , así por encima, que hiciste en… (mientras mira el papel que tiene delante, que es mi CV recién salido de una impresora, y busca con la mirada el nombre de una de las empresas en la que has trabajado)?"
Aquí se me hiela la sangre y me da rabia  ¿Por qué rabia? Porque por mi trabajo colaboro en diferentes proyectos y por tanto tengo un CV bastante detallado de tooooodos los proyectos en los que he estado y que he hecho en cada uno de ellos, y está claro que este personaje no se ha mirado nada de nada. No son temas que se puedan resumir en un “cuéntame un poco” porque realmente lo que ha de interesar y el valor añadido son los detalles especificados claramente en el CV. Entonces pienso que vaya inepto y vaya empresa, que no tiene ni la deferencia de leerse el CV antes de una entrevista.
A veces el personaje se presenta y te dice que es la psicóloga/o (normalmente pertenecen al sexo femenino) y que va a hacerte unas preguntas. En realidad te está diciendo “voy a comprobar que no eres una psicópata en serie, ni una trepa, que a no ser que ocurra un accidente no deseas tener más hijos, que son sanos y que tienes back up por si se ponen malos, y SOBRE TODO, no me preguntes sobre las tareas específicas del puesto de trabajo que ofertamos ni el posible salario porque no tengo ni idea, yo pertenezco a RRHH”.Y sonríen, y tú sonríes. Esto no me da rabia, es lo que hay y punto, pero claro, siempre es preferible tener toda la información posible sobre un trabajo. 
En cambio, cuando me encuentro con alguien que tiene mi CV lleno de apuntes, que me pregunta cosas concretas sobre algunos proyectos en los que he estado y que además es capaz de explicarme exactamente cuál sería el rol y las responsabilidades del puesto ofertado, me dan ganas de tirarme a sus brazos y darle un beso. Tú sí que vales y ojalá sea yo la elegida!!!

10 de enero de 2011

Cortado con leche natural (o del tiempo)

Parece un tema simple pero no debe ser tan simple cuando, por norma general, ME ocurre lo siguiente:

Escenario: Bar lleno o no de gente, con camarero que parece curtido, ha puesto muchos cortados y cafés en los últimos meses.

- Hola, buenas, ¿cúando puedas me podrás poner un cortado con leche natural, por favor? Gracias.

No parece una petición extraña, ¿verdad?,  pero puede ocurrir lo siguiente:

OPCIÓN A): el camarero se hace el loco, tiene un montón de curro y sólo le faltas tú con las chorradas de la leche natural, por tanto, en su mente, ya entrenada, se ha producido un extraño proceso químico que ha conseguido anular la percepción de la parte de la frase "con leche natural", de manera que el resultado es un cortado bien calentito, ya que hace un momento que ha calentado la leche que tiene en la jarra.

OPCIÓN B): el camarero va hacia la máquina de café, saca el filtro, le da golpes para que caiga el café molido enganchado, lo encaja en el molinillo, lo llena de café, lo encaja en la cafetera (todo con una rapidez y profesionalidad increible) y justo antes de darle al botón, se gira y pregunta:

- ¿corto?
y tú dices,
- No, con leche natural.

 En principio estás salvada, a no ser que el coeficiente del camarero sea de -100 tendrás tu cortado con leche natural.

OPCIÓN C): Ésta es la opción más común. El camarero no da muestras de no haberte entendido, de hecho él va haciendo y de repente, tus ojos se abren, se abren mucho, estás a punto de que salgan de tus cuencas porqué tienes delante tuyo un cortado marrón claríiiiiisimo , es decir , un cortado corto de café, eso sí, con la leche natural.

En fin, con el tiempo he aprendido que lo mejor es decir:

-Hola, buenas, ¿cúando puedas me podrás poner un cortado largo de café con leche natural, por favor? Gracias.

Evidentemente, nada en contra del gremio de la restauración, yo también he trabajado en él y hay que reconocer que en más de un momento le hubiera puesto un café bien cargado a quién me lo pide descafeinado  o sencillamente se lo hubiera tirado por encima.

En realidad no tengo tan mal carácter pero nunca he entendido la dificultad del tema de los cortados con leche natural, y me consta que no soy la única...